¿Cuándo la realizamos?
Cuanto antes mejor, la prevención es el mejor tratamiento. Antes del embarazo o durante este para conocer el estado de tu piso pélvico, y así poder prevenir.
Es muy importante luego del embarazo, tanto parto como cesárea. Dado que durante esta etapa recibe todo el peso del bebé y del útero, más los cambios mecánicos que se producen, y durante el parto sus músculos son distendidos. Pero esto no es condición para tener un piso pélvico debilitado. Existen mujeres con piso pélvico debilitado sin haber estado embarazadas.
¿En qué consiste?
Primero conocer tu historial médico y realizar una serie de cuestionarios donde se valorará los hábitos miccionales y defecatorios. Sexualidad y hábitos alimenticios. Que tipo de deporte realiza, y cómo está impactando los síntomas en tu calidad de vida. Luego realizamos una exploración física, haciendo una valoración abdominal y postural. Valoración profunda de los músculos del abdomen para ver si existe diástasis. Y luego una exploración intracavitaria vía vaginal. Ahí valoraremos la fuerza, el tono, los reflejos, dolor. Valorar cicatrices de episiotomía, o desgarros.
Con todo esto te podré hacer un diagnóstico y ayudar para establecer una rutina de ejercicios adecuados, cómo y cuántos ejercicios de Kegel hacer por ejemplo, hipopresivos y otros ejercicios de suelo pélvico.
También podrá haber posibilidad que necesitemos hacer una consulta a ginecología o derivarte para hacer un tratamiento con fisioterapia, para combinar los beneficios de ciertos tratamientos pasivos con una corrección de hábitos y con el trabajo del control motor que se adquiere con la práctica constante de los ejercicios. Y así las mejoras de la patología del piso pélvico que presentes llegarán para quedarse.